Los trastornos mentales y los trastornos por abuso de sustancias han sido descritos a nivel mundial como una de las causas primarias de años de vida perdidos por muerte prematura (YLLs). Por ello en un país como Colombia, quizás la única manera de mejorar la salud de la población sea convertir en prioridad la prevención y tratamiento de estos trastornos 1.
La Organización Mundial de la Salud (WHO) indica que aproximadamente un 48% de la población mundial mayor de 15 años consume bebidas alcohólicas y el 16% de estos participan de un consumo episódico de esta sustancia 2. De toda la carga global de daño que se le atribuye al consumo de alcohol en las regiones en desarrollo a nivel mundial, la más alta esta en América Latina y el Caribe, donde el 9.7% de los años de vida potencialmente perdidos (DALYs) y el 4.5% de las muertes son atribuidas a complicaciones relacionadas con el consumo de alcohol 3. A nivel mundial se estima que 3.3 millones de muertes (5.9% de las muertes a nivel mundial en 2012) y 139 millones de DALYs fueron causados por el consumo de alcohol 2.
Tanto en países desarrollados como en países en vía de desarrollo, se ha demostrado que el consumo de alcohol causa un daño significativo a la salud mental, física y social de personas y comunidades 4,5. De igual manera, se han encontrado efectos negativos entre el consumo de alcohol y el sistema de justicia penal y criminal, el sector laboral y el desarrollo socio-económico 6.
Los países con ingresos altos tienen el mayor consumo de alcohol per cápita y la mayor prevalencia de consumo episódico intenso en bebedores. El alcohol es consumido por personas de todas las edades y grupos socio-económicos; y se sabe que usualmente inicia temprano en la adolescencia 7,8. Sin embargo, las personas con estatus socio-económico bajo parecen ser más vulnerables a los problemas y consecuencias del consumo de alcohol 9.
Existe evidencia substancial para decir que el consumo excesivo de alcohol está relacionado con comportamientos riesgosos y con comorbilidad con varias enfermedades mentales. Lo cual puede variar por género 10,11 e incluye violencia común 12, violencia intrafamiliar, accidentes de tráfico, lesiones de causa externa intencionales y no intencionales, al igual que comportamiento sexual de riesgo para VIH; todos ellos son problemas de salud pública relacionados con el consumo de elevado de alcohol 13,14. El uso de sustancia psicoactivas suele suceder conjuntamente con el consumo de alcohol, lo cual incrementa la probabilidad de comportamientos de alto riesgo 15. Adicionalmente, los trastornos de comportamiento, ansiedad, depresión, manía y otros trastornos psiquiátricos están frecuentemente asociados con el consumo excesivo de alcohol 10,16.
La Encuesta Epidemiológica Nacional Estadounidense sobre Alcohol y Condiciones Relacionadas (NESARC) ofrece información detallada sobre la comorbilidad de AUD con otros trastornos por consumo de sustancias y confirma los hallazgos descritos en estudios previos 17,18. En estos estudios, comparando con el grupo de personas solo con AUD, los trastornos por consumo de sustancias y comorbilidad fueron más frecuentes en hombres jóvenes, solteros y en aquellos de nivel socio-económicos bajo. De acuerdo con numerosos estudios, la complejidad clínica, los costos y las discapacidades relacionadas con los trastornos por uso de alcohol, son potencializadas por la comorbilidad y la concurrencia de otros trastornos mentales 17.
La información sobre la concurrencia y comorbilidad de los AUD en Colombia está limitada a algunos reportes que indican una alta prevalencia 19,20. El Gobierno de Colombia emitió el decreto 3039 de 2007, adoptando el Plan Nacional de Salud Pública, definiendo la salud mental como una de sus prioridades, y el control del alcohol y otras sustancias como una de las metas por cumplir 8. La Encuesta Nacional de Salud Mental de Colombia (ENSM), llevada a cabo en el 2003-2004, reveló una alta prevalencia de vida de los trastornos de ansiedad (19.3%), trastornos de ánimo (15.0%) y trastornos por consumo de sustancias (10.6%). De tener en cuenta, de aquellos con trastornos por consumo de sustancias, el 94.7% no utilizaron los servicios de salud 21,22. La última encuesta de consumo de drogas realizada en Colombia fue en el año 2013 y concluyó que existe un incremento en el consumo de sustancias respecto a estudios previos 23, demostrando así la necesidad de entender mejor la comorbilidad. La Encuesta Nacional de Salud Mental de Colombia realizada en el 2015 utilizó un enfoque distinto al utilizado en 2003, se excluyó la determinación de prevalencia de algunos trastornos como esquizofrenia, trastorno por estrés postraumático y AUD al igual que los trastornos de consumo de otras sustancias 24, por ende no va a permitir investigar de manera profunda la comorbilidad de AUD con otras enfermedades mentales. Con base en lo explicado, puede argumentarse que un entendimiento adecuado de la comorbilidad es crucial para la prevención y el desarrollo de tratamientos multimodales para personas que padecen dos o más trastornos mentales en diferentes escenarios clínicos en países desarrollados y no desarrollados 25.
Este estudio basado en población fue realizado para determinar la relación en la vida, entre los AUD y otros trastornos mentales y adictivos en mujeres y hombres en Colombia entre los 18 y 65 años, a través de un análisis secundario de la Encuesta Nacional de Salud Mental de 2003-2004.
Este análisis secundario utilizó la base de datos de la Encuesta Nacional de Salud Mental del periodo 2003-2004 (Ministerio de Salud y Protección Social) para obtener información respecto de la concurrencia de desórdenes mentales y los AUD. Esta información fue recientemente publicada como archivos de uso público 26. La encuesta fue realizada en una población urbana de 5,526 hogares; 4,544 de estas fueron completadas por adultos con una tasa de respuesta del 87% basada en una muestra probabilística estratificada a nivel nacional de varias etapas. Los participantes de la encuesta son personas no institucionalizadas entre los 18 y 65 años de edad con residencia establecida en 5 distintas regiones del país.
La muestra que se encuentra a disposición del público está compuesta por 4,426 individuos. Una descripción detallada de procedimientos de muestra y otros detalles metodológicos de la encuesta están descritos previamente 21. La encuesta utilizo una sub-muestra interna para reducir la carga sobre los entrevistados al dividirla en dos partes. La Parte 1 incluía una evaluación de diagnóstico básica (N= 4,426). La Parte 2, por otro lado, incluía información sobre correlaciones y trastornos de interés secundario. Todos los entrevistados respondieron la Parte 1. Todos los encuestados de la Parte 1 que cumplieran con el criterio para cualquier trastorno y una sub-muestra de aproximadamente el 25% de los demás, fueron encuestados en la Parte 2 (N= 2,442).
La encuesta utilizó una versión computarizada de la Entrevista Diagnostica Internacional Compuesta (CIDI; 15th versión registrada) que brinda diagnósticos de acuerdo con el DSM-IV y el ICD-10. Los indicadores marcadores de trastornos para cada individuo no fueron publicados en los microdatos. Para identificar a los participantes con prevalencia de vida de cada trastorno, los autores siguieron las definiciones y criterios de la cuarta edición del Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-IV).
Para probar si existe diferencia en la prevalencia de vida de cada uno de los trastornos mentales según si el individuo era un consumidor de alcohol o no, se utilizó el test exacto de Fischer. Los AUD fueron definidos para aquellos que abusaban del alcohol o tenían algún tipo de dependencia, de acuerdo con el estudio original que seguía la literatura internacional. Adicionalmente, se realizó un análisis estratificado por género. Por último, para evaluar si las diferencias observadas en las estimaciones de prevalencia de vida de los diferentes trastornos desaparecían al controlar por características demográficas, socio-económicas, de comportamiento y variables auto-reportadas del estado de salud, se realizaron análisis de regresión logística. Todos los análisis fueron hechos en Stata ® 13 usando los comandos especializados del software para encuestas. Las variables de diseño de la encuesta como las unidades de muestra primarias (UMP) y los ponderadores de la encuesta fueron utilizadas en todas las estimaciones.
Las variables demográficas incluidas en las regresiones logísticas fueron edad, sexo, y estado civil. La última fue codificada usando cuatro variables binarias independientes: casado, separado/divorciado, viudo y soltero. La variable "Soltero" fue la categoría de referencia. Considerando los efectos no-lineales que se pudieran presentar debido a la edad, esta variable fue incluida en niveles y también elevada al cuadrado.
Las variables socio-económicas incluidas en las regresiones logísticas fueron educación y ocupación laboral. El nivel de educación fue codificado como primaria, deserción de bachillerato, bachiller, y estudios de pregrado (incluye tanto los que terminaron y los que no); la deserción de primaria (incluyendo los que nunca atendieron) fue la categoría de referencia. El estatus laboral fue codificado utilizando cuatro variables binarias: está trabajando, está estudiando, ama de casa o retirado, y otros. La variable "Otros" fue la categoría de referencia.
Las variables de comportamiento incluidas en los análisis de regresión fueron obesidad y fumador. Obesidad/sobrepeso fue codificada como una variable dicótoma que toma el valor de 1 para individuos con un Índice de masa corporal (IMC) mayor de 25. Fumador fue codificado como una variable dicótoma. Finalmente se incluyó la variable estado de salud y se codificó como "Excelente/ Muy Buena", "Buena", y "Regular o Mala". "Excelente/ Muy Buena" " fue la categoría de referencia.
La Tabla 1 muestra características socio-demográficas y comportamentales en ambas poblaciones. En particular, las personas con AUD correspondieron al 9% de la población, de la cual el 88% eran hombres con una edad promedio de 37 años. El estado civil que predominó fue soltero (56%), seguido de casado (31%). Más del 30% de estos tuvieron altos niveles de educación (estudios universitarios), y el 74% reportó su estatus laboral como "trabajando". La obesidad fue una característica para casi el 8% de la población, y el 28% eran fumadores al momento de la encuesta. Por último, el 41% de las personas con AUD reportaron su estado de salud como bueno.
AUD‡ | No AUD‡ | valor- |
|
---|---|---|---|
Características demográficas | |||
Edad (Años) | 37.0 (1.062) | 36.7 (0.299) | 0.774 |
Hombre (%) | 88.2 (0.019) | 41.3 (0.012) | <0.001* |
Estado civil | |||
Casado | 30.7 (0.039) | 33.5 (0.010) | 0.484 |
Separado/divorciado | 11.1 (0.023) | 9.3 (0.005) | 0.389 |
Viudo | 1.9 (0.009) | 3.6 (0.004) | 0.192 |
Nunca se ha casado (Referencia) | 56.3 (0.040) | 53.6 (0.011) | 0.514 |
Características socioeconómicas | |||
Educación | |||
Primaria | 11.6 (0.021) | 13.4 (0.007) | 0.446 |
Bachillerato incompleto | 24.2 (0.030) | 24.1 (0.010) | 0.980 |
Bachiller | 16.4 (0.025) | 21.7 (0.010) | 0.070 |
Profesional | 30.6 (0.043) | 24.9 (0.012) | 0.183 |
Primaria incompleta (Reference) | 17.1 (0.027) | 15.8 (0.007) | 0.637 |
Estado ocupacional | |||
Trabaja | 74.0 (0.038) | 54.9 (0.012) | <0.001* |
Estudia | 4.8 (0.030) | 7.4 (0.010) | 0.497 |
Ama de casa o jubilados | 9.9 (0.024) | 26.9 (0.009) | <0.001* |
Desempleados (Reference) | 11.3 (0.021) | 10.8 (0.008) | 0.798 |
Características de comportamiento | |||
Obeso | 7.7 (0.017) | 6.6 (0.005) | 0.507 |
Fuma en la actualidad | 28.4 (0.040) | 13.1 (0.006) | <0.001* |
Auto percepción de salud | |||
Excelente/Muy buena (Reference) | 28.0 (0.033) | 34.8 (0.012) | 0.065 |
Buena | 41.3 (0.039) | 41.1 (0.011) | 0.960 |
Regular/Mala | 30.7 (0.039) | 24.1 (0.010) | 0.076 |
N | 325 | 4,101 | |
‡Porcentaje (Error estándar) *Significancia estadística (p <0.05) |
Al comparar estos resultados con la población no consumidora de alcohol, las personas con AUD tenían una probabilidad más alta de ser hombres, de estar trabajando, y de ser fumadores; se encontró una menor probabilidad de que estuvieran retirados o en oficios del hogar con un nivel estadístico de significancia del 5%. Para un nivel estadístico de significancia del 10%, estas personas tenían una probabilidad más baja de ser bachilleres, de que tuvieran un estado excelente/bueno de salud, y una probabilidad más alta de tener un estado de salud regular o malo.
La Tabla 2 muestra la prevalencia estimada de desórdenes mentales para el total de la población; la Tabla 3 para hombres y para mujeres, y presenta pruebas estadísticas sobre las diferencias en prevalencia entre las personas que tenían y no tenían problemas de dependencia o abuso del alcohol. Para todas las personas y también para hombres, todos los desórdenes mentales estudiados fueron más prevalentes en el grupo con AUD con la excepción de los trastornos depresivos menores, trastorno de estrés postraumático, dependencia a la nicotina, y trastorno negativista desafiante. En el caso de las mujeres con AUD comparadas con las que no sufren de AUD, se encontró la existencia de una prevalencia mayor para: trastornos depresivos, abuso de sustancias, ansiedad por separación, trastorno negativista desafiante, y trastornos de conducta.
AUD‡ | No AUD‡ | valor-p | |
---|---|---|---|
Número de entrevistados | 325 | 4,101 | |
Trastornos del estado de ánimo | |||
Trastorno depresivo mayor | 17.0 (0.025) | 10.2 (0.010) | 0.004* |
Trastorno depresivo menor | 1.7 (0.008) | 2.1 (0.003) | 0.716 |
Bipolar I | 7.3 (0.031) | 1.5 (0.003) | <0.001* |
Trastornos relacionados con ansiedad | |||
Agorafobia | 5.2 (0.017) | 2.2 (0.003) | 0.016* |
Trastorno de estrés postraumático | 2.0 (0.008) | 1.3 (0.002) | 0.346 |
Trastorno por consumo de sustancias relacionadas | |||
Abuso de drogas | 7.0 (0.016) | 0.3 (<0.001) | <0.001* |
Dependencia de drogas | 5.2 (0.013) | 0.2 (<0.001) | <0.001* |
Dependencia a la nicotina | 3.2 (0.014) | 1.3 (0.002) | 0.053 |
Otros trastornos | |||
Ansiedad por separación | 13.6 (0.033) | 5.6 (0.004) | <0.001* |
Trastorno negativista desafiante | 3.1 (0.014) | 1.6 (0.003) | 0.137 |
Trastorno de conducta | 5.4 (0.013) | 1.0 (0.002) | <0.001* |
AUD: Desórdenes por uso de alcohol ‡Porcentaje (Error estándar) *Significancia estadística (p <0.05). Para todas las variables se realizó la prueba exacta de Fischer |
Hombres | Mujeres | |||||
---|---|---|---|---|---|---|
AUD | No AUD | Valor-p | AUD | No AUD | Valor-p | |
Número de entrevistados | 265 | 1,435 | 60 | 2,666 | ||
Trastornos del estado de ánimo | ||||||
Trastorno depresivo mayor | 14.4 (0.025) | 5.7 (0.008) | <0.001* | 37.10 (0.076) | 13.40 (0.014) | <0.001* |
Trastorno depresivo menor | 1.9 (0.009) | 1.6 (0.003) | 0.710 | |||
Bipolar I | 7.7 (0.035) | 1.2 (0.003) | <0.001* | 4.12 (0.023) | 1.69 (0.004) | 0.143 |
Trastornos relacionados con ansiedad | ||||||
Agorafobia | 5.2 (0.019) | 0.9 (0.002) | <0.001* | 4.73 (0.028) | 3.11 (0.004) | 0.500 |
Trastorno de estrés postraumático | 1.8 (0.008) | 0.6 (0.002) | 0.074 | 3.52 (0.028) | 1.76 (0.003) | 0.402 |
Trastorno por consumo de sustancias relacionadas | ||||||
Abuso de drogas | 7.5 (0.177) | 0.6 (0.002) | <0.001* | 2.82 (0.020) | 0.04 (<0.001) | <0.001* |
Dependencia de drogas | 5.9 (0.149) | 0.2 (0.001) | <0.001* | 0.27 (0.002) | 0.17 (0.003) | 0.689 |
Dependencia a la nicotina | 3.4 (0.016) | 1.6 (0.003) | 0.147 | 2.06 (0.150) | 1.13 (0.002) | 0.422 |
Otros trastornos | ||||||
Ansiedad por separación | 13.1 (0.037) | 3.8 (0.006) | <0.001* | 17.53 (0.051) | 6.76 (0.005) | 0.002* |
Trastorno negativista desafiante | 2.8 (0.014) | 2.2 (0.005) | 0.696 | 5.86 (0.033) | 1.16 (0.002) | 0.003* |
Trastorno de conducta | 5.4 (0.013) | 1.3 (0.003) | <0.001* | 5.75 (0.027) | 0.69 (0.001) | <0.001* |
‡Porcentaje (Error estándar) *Significancia estadística (p<0.05). Para un % de variables la prueba exacta de Fischer es reportada El trastorno depresivo menor no fue incluido porque no había observaciones para las mujeres que tenían problemas de abuso/dependencia del alcohol |
Los análisis de regresión están reportados en la Tabla 4. La tabla únicamente reporta el OR (odds ratio) para la población con AUD comparada con la población sin AUD; sin embargo, todas las regresiones incluyeron todas las variables descritas en la Tabla 1 como regresores independientes. En ese sentido, los resultados reportados son ORs después de ajustar por las diferencias en las variables demográficas, socio-económicas, comportamentales y estados de salud. Como se muestra en la Tabla 4, la población con AUD tenían mayor probabilidad de ser diagnosticados con todos los trastornos mentales menos los trastornos depresivos menores, trastorno de estrés postraumático, la dependencia a la nicotina, y el trastorno negativista desafiante.
OR | valor-p* | 95% IC | ||
---|---|---|---|---|
Trastornos del estado de ánimo | ||||
Trastorno depresivo mayor | 2.73 | <0.001 | 1.74 | 4.29 |
Trastorno depresivo menor | 0.89 | 0.835 | 0.31 | 2.55 |
Bipolar I | 5.14 | <0.001 | 2.33 | 11.36 |
Trastornos relacionados con ansiedad | ||||
Agorafobia | 3.95 | <0.001 | 1.97 | 7.91 |
Trastorno de estrés postraumático | 2.02 | 0.153 | 0.77 | 5.27 |
Trastorno por consumo de sustancias relacionadas | ||||
Abuso de drogas | 12.74 | <0.001 | 5.22 | 31.08 |
Dependencia de drogas | 20.72 | <0.001 | 9.60 | 44.75 |
Dependencia a la nicotina | 1.92 | 0.310 | 0.70 | 5.27 |
Otros trastornos | ||||
Ansiedad por separación | 3.33 | <0.001 | 1.87 | 5.90 |
Trastorno negativista desafiante | 1.48 | 0.443 | 0.54 | 4.01 |
Trastorno de conducta | 3.56 | <0.001 | 1.76 | 7.21 |
*valor- |
Este estudio representa el primer análisis de comorbilidad en una muestra poblacional en Colombia de los AUD con otros trastornos mentales. Nuestros resultados demuestran una prevalencia mayor de Trastorno Depresivo Mayor, Trastorno Afectivo Bipolar (TAB) Tipo I, Agorafobia, Abuso de Sustancias, Dependencia de Sustancias, Ansiedad de Separación y Trastornos de Conducta en la población adulta de Colombia con AUD, con respecto a la población general, similar a lo que se ha descrito en otros estudios 27,28. Se ha reportado previamente que "La carga de morbilidad atribuible al uso de sustancias legales es claramente superior a la por uso de drogas ilegales y una gran parte de la morbilidad atribuida a las sustancias sería evitable si se implementaran intervenciones efectivas", lo que resalta la importancia de los hallazgos de este estudio en Colombia 29. Adicionalmente, el uso problemático del alcohol es frecuentemente sub diagnosticado y sub tratado; de hecho, en Latinoamérica el consumo de alcohol es un 50% mayor que la media mundial y casi tres cuartas partes de las personas que abusan o dependen del alcohol nunca han recibido algún tipo de tratamiento 30,31. Adicionalmente el acceso a servicios de salud para trastornos mentales en Colombia es bajo (40%), lo cual sugiere una serie de barreras para la atención en salud de la población enferma 22,24.
La fuerte relación que se encontró entre los trastornos bipolares tipo I y los AUD ha sido reportada previamente. Y se ha relacionado con menor adherencia al tratamiento farmacológico, mayor presencia de síntomas mixtos, un mayor número de hospitalizaciones 32, y consecuentemente con mayores costos directos e indirectos 17; lo cual enfatiza la necesidad de identificar y tratar esta comorbilidad de manera temprana 33. En esta muestra de pacientes la comorbilidad con AUD y trastorno bipolar fue mayor en hombres y mayor en TAB tipo I, sin embargo, cuando las mujeres se compararon con mujeres sanas se encontró que la comorbilidad era más alta en mujeres 7.
En nuestro estudio se encontró que el AUD y la depresión mayor en Colombia tienen una correlación tanto en hombres como mujeres. Así mismo, se encontró relación con trastornos de ansiedad y abuso de alcohol en la población masculina, particularmente en aquellos con agorafobia y ansiedad social. En esta comorbilidad la hipótesis reportada es que existe una retroalimentación positiva entre los dos trastornos 34,35. Los trastornos del estado de ánimo al igual que los trastornos de ansiedad son los trastornos psiquiátricos más prevalentes alrededor del mundo y ha sido reportada consistentemente su comorbilidad con AUD. Se sabe adicionalmente que la comorbilidad con trastornos del estado de ánimo y trastornos de ansiedad se presenta de manera independiente de la intoxicación aguda y la abstinencia 3,7,36.
Dentro de la población colombiana se encontró previamente comorbilidad hetereotípica (con otros trastornos mentales), así como comorbilidad homotípica (con otros trastornos de consumo de sustancias), incluyendo la dependencia a la nicotina 37. Análisis recientes han mostrado que la comorbilidad hetereotipica y homotipica se distribuyen de manera distinta en hombres y mujeres. En nuestros hallazgos, las mujeres consumen menos alcohol y presentan una menor cantidad de problemas con el consumo de otras sustancias 20.
En un análisis factorial de la Encuesta Nacional de Comorbilidad de los Estados Unidos, se encontraron tres tipos de comorbilidad que representaban el 70% de la población y el 43.6% de los casos severos estaban representados por comorbilidad de AUD 27. Otros estudios han indicado que la comorbilidad de AUD con trastornos de sustancias y trastornos externalizantes (como los trastornos de conducta), pueden tener una etiología subyacente a diferencia de la comorbilidad con trastornos internalizantes (como la depresión y trastornos de ansiedad) que parecen estar relacionados con factores etiológicos compartidos 38. Los trastornos disruptivos, como trastornos de conducta o el trastorno negativista desafiante, han sido reportados como las condiciones con mayor comorbilidad en adolescentes con AUD. De igual manera, estudios prospectivos indican que los trastornos de conducta predicen más fuertemente un futuro desarrollo de un AUD 39.
La percepción que se obtuvo a partir de este estudio sobre el estado de salud en la población con AUD resultó ser baja, sugiriendo mayor riesgo para resultados adversos en salud de manera general 40 y contribuyó de manera importante al entendimiento y validación del impacto de la comorbilidad de los trastornos mentales en la salud física en las personas de la muestra. La comorbilidad de los trastornos mentales y trastornos de consumo de alcohol ha sido asociada con mayor discapacidad, síntomas severos, curso ominoso de las enfermedades y pobres resultados de los tratamientos 17,38,41. También se debe señalar que esta población reportó usar los servicios de salud más frecuentemente que la población general 17,38. Adicionalmente, se ha encontrado frecuentemente que la comorbilidad es un factor de riesgo para la salud y comportamientos de riesgo para el contagio del VIH 42,43.
Un consumo moderado de alcohol haría que se disminuyera la incidencia de déficits neurológicos y del desarrollo, accidentes de tránsito, delincuencia, trastornos psiquiátricos, hipertensión y VIH 44-46. También mejoraría la probabilidad de un mejor desarrollo físico y mental y probablemente disminuiría la incidencia de trastornos psiquiátricos y de abuso de sustancias 47. El manejo apropiado del consumo temprano en la adolescencia podría impactar en el desarrollo cognitivo y socio-emocional, resultando en un mejor desempeño académico, autoestima, e interacciones sociales y familiares 48,49.
De manera consistente con otros estudios en personas con AUD y otros trastornos mentales, los resultados sugieren que los trastornos de consumo de sustancias están correlacionados con AUD en la población colombiana, y mucho más prevalentes que en la población general 22,34. Es llamativo que no se encontrara relación con el trastorno por estrés postraumático, como lo han reportado otros autores, lo que resulta en un tema para futuras investigaciones 48.
Los resultados destacan la importancia de la comorbilidad como una señal de la gravedad de la enfermedad y apoya la necesidad de formar profesionales de la salud en el tema y desarrollar nuevos tipos de intervención multimodal y servicios apropiados para este tipo de intervenciones 50,51.
La Encuesta Nacional utilizada en este estudio proporcionó información de calidad para poder llevar a cabo los análisis secundarios, con la ventaja de permitir evaluar las comorbilidades en una manera costo-eficiente. No obstante, es necesario mencionar que el análisis secundario no era un objetivo de la encuesta original; lo que puede generar algún tipo de sesgo 4. Adicionalmente, el diseño de este estudio de carácter transversal no permitió inferir la causalidad de las relaciones entre AUD y otros trastornos mentales. Aunque la información original es del 2003, los autores no creen que la prevalencia de los trastornos estudiados hayan decrecido de manera importantes durante esos años, dado que ninguna intervención ha sido reportada, por el contrario, como se indica en la encuesta de abuso de sustancias, la prevalencia de AUD parece está incrementando, lo que significa que los resultados no estarían sobreestimando los efectos 23.
Los resultados de este estudio sugieren que la concurrencia de AUD y otros trastornos mentales es prevalente entre las mujeres y hombres colombianos. Es prioritario optimizar los servicios de salud y desarrollar intervenciones en y para la comunidad que lleve a confrontar esta problemática que aqueja la salud pública del país.
Johnny Campiño proporcionó una excelente asistencia en investigación. Los análisis preliminares realizados antes del 2010, los cuales no condujeron a una publicación, fueron presentados en dos reuniones académicas y fueron respaldados por la Corporación de Lucha Contra el Sida de Cali, Colombia; y el Fogarty International Research Training Center de la Universidad de Miami bajo la tutoría de Gail Shor-Posner y John Lewis (NIH/Fogarty 043 TW00017).
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