Formación integral de los estudiantes: Percepción de los profesores de la Facultad de Salud de la Universidad del Valle

Belkys Angulo M.D.1, Luz Haydée González, Bact.2, Claudia Santamaría, Enf.3, Pedro Sarmiento, Odont.4

1.Profesora Asistente, Directora Escuela de Medicina, Facultad de Salud, Universidad del Valle, Cali, Colombia.
e-mail: belkys@telesat.com.co
2. Profesora Asociada, Directora del Programa Académico de Bacteriología y Laboratorio Clínico, Facultad de Salud, Universidad del Valle, Cali, Colombia. e-mail: gosanche@yahoo.com
3. Profesora Asociada, Directora Escuela de Enfermería, Facultad de Salud, Universidad del Valle, Cali, Colombia.
e-mail: clasanta@univalle.edu.co
4. Profesor Asociado, Director Oficina de Desarrollo Pedagógico, Facultad de Salud, Universidad del Valle, Cali, Colombia.
e-mail: pedrosar@univalle.edu.co
Recibido para publicación abril 26, 2007 Aceptado para publicación octubre 19, 2007


RESUMEN

Introducción: La importancia y preocupación por la formación integral, motivó a los autores a indagar sobre el significado que tiene para los profesores de la Facultad de Salud de la Universidad del Valle la formación integral de los estudiantes.

Objetivo: Indagar en los docentes sus concepciones, su sentir y sus prácticas con respecto a la formación integral de sus estudiantes.

Metodología: La fenomenología hermenéutica se aplicó como método para el análisis; la información se obtuvo mediante entrevistas en profundidad a 15 profesores escogidos al azar entre las siete escuelas de la Facultad.

Resultados: Hubo cinco grandes aspectos: inicio en la enseñanza, función del docente, aspectos conceptuales, factores que facilitan y factores que dificultan la docencia; a través de ellos los profesores describen lo que piensan, sienten y hacen sobre la formación integral.

Conclusiones: Se puede afirmar que pese a la claridad de las políticas institucionales sobre formación integral y la coherencia que se encuentra entre aquéllas y lo que los propios profesores plantean como sus ideas, sentimiento y acción, existen brechas sobre las cuales se requiere el trabajo conjunto de todos los actores involucrados, para lograr la meta perfecta.

Palabras clave: Formación integral; Curriculum; Investigación cualitativa.

Meaning of the integral formation for the professors of the faculty of health of the Universidad del Valle

SUMMARY

Introduction: The relevance and the concern about integral formation motivated the authors to investigate the meaning that the Students Integral Formation has for the professors of the Faculty of Health of the Universidad del Valle, considering as well the professors´ conceptions, feelings and practices.

Objective: To know professor’s conceptions, feelings and practices, related to student’s integral formation.

Methods: The methodology applied for the analysis was the hermeneutic phenomenology; information was obtained through deep interviews, developed with 15 randomly selected professors, among the seven schools of the Health Faculty.

Results: The results revealed five great aspects: teaching initiation, the teachers´ role, conceptual aspects, factors that facilitate it and factors that difficult it, through which the professors describe what they think, feel and do in relation to the Integral Formation.

Conclusions: The conclusions allow to establish that in spite of the clarity of the institutional policies on integral formation and the coherence among them and the professors’ thoughts, feelings and actions, there are gaps over which it is required a joint action of all the actors, to accomplish a successful aim.

Keywords: Integral formation; Curriculum; Qualitative investigation.


Varios investigadores, filósofos, psicólogos, educadores, identifican la importancia de la formación integral (FI) para el desarrollo del ser humano. Morin1, recomienda entre otros aspectos la necesidad de enseñar a los estudiantes la condición humana, comprender la ética y sus relaciones con el universo.

La UNESCO en Latinoamérica ha trabajado en este sentido y en el informe que Delors2 presentó a la Comisión Internacional sobre la Educación para el Siglo XXI, se refiere a lo necesario que es aplicar el concepto de «educar durante toda la vida», pues permite a la persona adquirir flexibilidad, diversidad y accesibilidad en el tiempo y el espacio. La Comisión recomienda que a las personas se las debe formar integralmente desde cuatro dimensiones que se constituyen en los pilares básicos de la educación: aprender a conocer, aprender a hacer, aprender a ser y aprender a convivir.

Neef3 al referirse a la FI, dice que sólo cuando haya la posibilidad de tener una educación que trascienda las fronteras de la formación profesional, se tendrá capacidad de contribuir al desarrollo de los grandes problemas de la humanidad.

En Colombia, la Ley 80 de 19804, la Constitución Política de 19915 y la Ley 30 de 19926, enfatizan que la FI se debe poner en práctica en todas las instituciones formadoras del recurso humano, desde la educación primaria hasta la formación universitaria.

La Ley 30 de 1992 que organiza el servicio público de la educación superior en Colombia, es explícita al recomendar la necesidad de profundizar en la FI de los estudiantes, despertar en los educandos un espíritu reflexivo orientado al logro de la autonomía personal, en un marco de libertad de pensamiento y de pluralismo ideológico, que tenga en cuenta la universalidad de los saberes y la particularidad de las formas culturales existentes en el país, sin perjuicio de los fines específicos de cada campo del saber. Por tanto, la educación superior se desarrollará en un marco de libertades de enseñanza, de aprendizaje, de investigación y de cátedra.

Acorde con estas directrices, muchas universidades del país hacen indiscutible la FI en su política curricular y en sus misiones. En la Universidad del Valle, la FI de los estudiantes ha sido una preocupación permanente desde sus comienzos. En las últimas décadas aparece como política universitaria y así, a finales de 1989, mediante el Acuerdo 0037 del Consejo Superior se definieron como principios rectores la FI y la flexibilidad curricular, que se ratificaron después con los Acuerdos 001 de 19938 y 009 de 2000 del Consejo Superior9, a través de los cuales se han establecido las políticas y normas para los programas de pregrado en la Universidad del Valle.

La FI se encuentra vigente en las discusiones políticas, filosóficas y de educación y la Universidad del Valle no ha sido ajena a ello, pues la considera como principio rector de sus programas de formación y la incluye en el Plan Estratégico de Desarrollo 2005-201510; sin embargo, se ha hecho poca investigación sobre este tema.

Como un aporte para entender el mundo estudiantil y sus vivencias durante su formación como personas y como profesionales, Tovar11 adelantó en la Facultad de Salud, un estudio para indagar las percepciones que tienen los estudiantes frente a sus experiencias con respecto a la FI que reciben de sus docentes. Esta investigación permitió conocer que los estudiantes de la Facultad de Salud consideran la FI en tres dimensiones: «la formación que reciben no sólo en lo profesional sino en lo personal, con un componente humanístico y social. La segunda, se relaciona con el saber de todo un poco, que les permita captar un problema desde diversos ángulos y la tercera, se enfoca en la relación de la teoría con la práctica y cómo estas dos actividades se pueden articular y corresponder entre sí.»

Si bien es muy importante conocer la percepción de los estudiantes y su sentir frente a la FI, para incorporar la situación real y contribuir con su mejoramiento, es imprescindible captar también lo que juzgan los profesores acerca de la forma como sienten, interpretan y hacen la FI de sus estudiantes. El objetivo de este trabajo fue explorar tales percepciones a través de una investigación cualitativa en la que participaron docentes pertenecientes a las siete escuelas de la Facultad de Salud.

METODOLOGÍA

Para garantizar el rigor científico de la investigación se tuvieron en cuenta los siguientes aspectos, según los criterios de Sandelowski12 y Parker y Addison13: coherencia o credibilidad de la interpretación, o aplicabilidad.

Por coherencia o credibilidad se entiende el grado en que los participantes acepten como verdadera la descripción que se hace del fenómeno estudiado.

Según Guba y Lincoln14 se refiere a que las evidencias de la información se conserven y a que se tenga claridad acerca de las características de los participantes.

La aplicabilidad se considera como una consecuencia de los criterios del rigor científico y se refiere a las posibilidades que los resultados se puedan transferir o aplicar a otras personas, que tengan características y contextos similares.

La información se obtuvo con entrevistas en profundidad, donde se tuvieron en cuenta los principios éticos de la Sociedad Americana de Antropología15 y los requisitos del Comité de Ética de la Facultad de Salud. La entrevista en profundidad no es una entrevista rígida. Para hacerla se consideran temas centrales prioritarios que se deben cubrir a lo largo de la conversación con el entrevistado, a quien induce a la reflexión y a la narración de sus propias experiencias para que descubra sus motivaciones, conflictos y vivencias y pueda situar todo el relato en su contexto personal, en lugar de abstraerlo del mismo.

El número de docentes de la muestra en este tipo de estudio no se puede predeterminar antes de la investigación. El tamaño se define de acuerdo con la calidad de la información que se consiga. Llega un momento en que se saturan los datos y entonces se define realmente el tamaño de la muestra.

Participaron 15 docentes de la Facultad de Salud, incluyendo representantes de cada una de las siete escuelas, que se seleccionaron entre nombrados y contratistas, tanto de tiempo completo como de medio tiempo, con un vínculo mínimo de dos años. Estos criterios de participación tenían que ver con el hecho de que durante ese tiempo y con esa modalidad de nexo, los participantes ya habían experimentado vivencias en la relación docente-estudiante, lo cual garantizaba que constituían un grupo representativo del fenómeno que se iba a describir. Se enfatiza que el tamaño de la muestra se definió de acuerdo con la calidad de la información obtenida.

Los autores del presente trabajo, en parejas, hicieron y grabaron las entrevistas. Cada pareja tuvo a su cargo un grupo de participantes a quienes se les entrevistó de manera individual. Por la importancia de los aspectos no verbales, simultáneamente se llevó un registro en un cuaderno de notas. El número de entrevistas por persona se definió cuando la información que cada uno proporcionaba se hizo repetitiva, es decir se había saturado.

Se utilizó como método de análisis la fenomenología hermenéutica propuesta por Heidegger16, que permite describir los fenómenos ocultos donde tienen lugar y explorar además el significado que la experiencia vivida brinda a las personas, de acuerdo con el entorno donde viven. Heidegger plantea que la fenomenología hermenéutica es el significado de la acción humana; el estudio fenomenológico permite tener una mejor comprensión de lo que para el participante significa vivir una situación determinada.

El análisis de la información constituyó un proceso sistemático que se llevó a cabo durante todo el estudio y permitió identificar, codificar y dividir por categorías los patrones de los datos primarios. Cuando se realizaron las entrevistas y las notas de campo, además se hicieron los primeros análisis para identificar algunos temas donde el entrevistado debía profundizar un poco más; por esto fue necesario efectuar como mínimo dos entrevistas a cada profesor participante. Las segundas entrevistas permitieron verificar con el entrevistado la interpretación de la primera, para tener la seguridad, de haber entendido lo que quiso decir. Finalmente, se realizó el análisis profundo de cada entrevista y de todas en conjunto.

La información obtenida y analizada permitió conformar grupos de grandes cuerpos de conceptos denominados categorías generales, que contienen a su vez grupos o familias de conceptos, situaciones o percepciones relacionadas entre sí, que se agruparon en categorías intermedias y grupos más pequeños y particulares llamados categorías detalladas.

RESULTADOS

Las siguientes son las categorías generales que surgieron de la información de los profesores:

Inicio en la docencia. Recoge los motivos por los cuales el(la) profesor(a) se inició como docente en la Universidad. Permite identificar elementos que puedan tener importancia o incidir en su comportamiento como docente y en lo que él o ella piensa(n), siente(n) y hace(n) en FI.

Conceptualización de FI. Identifica lo que el profesor o profesora piensa que es la FI expresado como su percepción, o como la respuesta a las preguntas qué piensa y siente acerca de la FI.

Papel docente. Da respuesta a la pregunta de investigación acerca de lo que hace el profesor(a), brinda información sobre su patrón de conducta, su manera de hacer las cosas como docente, de modo específico en lo que tiene que ver con actividades en las que se encuentran involucrados los estudiantes y que se consideren relacionadas con FI.

Factores facilitadores para brindar FI. Permite identificar elementos del profesor(a) que facilitan la FI de los estudiantes, como forma de pensar, manera de hacer las cosas, formación, actitudes, aptitudes o habilidades y valores.

Dificultades para brindar FI. Identifica los factores que obstaculizan o hacen difícil llevar a cabo la FI de los estudiantes.
En los Cuadros 1 a 5 se recogen y comentan sólo algunos de los principales hallazgos en relación con cada una de las categorías generales y las intermedias y detalladas contenidas en ellas.

COMPETENCIA PROFESIONAL

Una de las principales razones por las cuales los profesores ingresan como docentes a la universidad es su competencia profesional. Para muchos profesores el inicio en la docencia se dio por una oportunidad laboral: «influyó una vez más, un colega que me invitó a ser parte del equipo de docentes de acá de la Universidad del Valle…». En algunos casos, los profesores manifestaron tener vocación o motivaciones de diferente orden: «creo que uno tiene que tener esa como, cómo se dice llevar en la sangre lo que uno va a hacer, gustarle».

Una motivación expresada por un profesor fue el reto que le representaba poder desarrollarse en lo profesional y en lo personal, en el entendido que ser docente es una categoría de un nivel intelectual alto. «...Un reto en muchas, en diversas formas, entre ellas el estar actualizado dentro de todo lo que es el desarrollo mismo de la actividad propia...» (Cuadro 1).

El significado que tiene la FI de los estudiantes para los profesores de la Facultad de Salud se expresó a manera de definiciones en algunos casos y en otros a través de las experiencias en el hacer cotidiano. En general, para los profesores la FI se relaciona con seis aspectos, en los que se agrupan las características relacionadas con lo que ellos piensan que es la FI (Cuadro 2):

1. Formación humana. La FI debe procurar la formación humana de los estudiantes y comprender, además de los aspectos científicos y tecnológicos de cada profesión, una gama de experiencias y posibilidades lúdicas, deportivas, sociales, culturales, artísticas, políticas, comerciales y gerenciales. En ella tiene un papel muy importante el desarrollo y fortalecimiento de la ética y los valores morales, propios del ser humano, así como de las actitudes y aptitudes características de la persona «...FI para mí es todo un panorama de aspectos que rodean al estudiante. La parte lúdica, la parte espiritual, la parte deportiva, la parte social, la parte de relaciones...». «…El profesional integral debe no solamente conocer los elementos básicos de su ciencia, debe tener las herramientas…las humanidades, las artes, la sociología, la psicología, las artes de la comunicación...».

Otro aspecto de la formación humana del estudiante se relaciona con su desarrollo como ciudadano integrado a la sociedad para contribuir con la solución de sus problemas, a través del mejoramiento del medio y de la calidad de vida de las personas. «...creo que no simplemente vamos a formar un profesional, sino que vamos a formar un ciudadano, para mí es formar un ciudadano, que se desempeñe en una profesión. Para mí eso es FI...».
2. Integración. Los profesores piensan que la FI permite la integración más allá de la mirada de los conocimientos, de las situaciones y de las personas, debe integrar conocimientos más elementos del ser, temas y conceptos y conocimientos de distintas disciplinas. Además, la integración comprende la visión de conjunto, el conocimiento del entorno y específicamente en salud, la mirada biopsicosocial del ser humano. «Me parece que todo ser humano tiene que tener una FI, no sólo la parte académica sino la parte como persona…».

Para que el estudiante logre esto, debe haber adquirido conocimientos propios de su disciplina y de otras áreas, por ejemplo humanidades y ciencias sociales. «...Que demuestre su idoneidad en lo técnico, científico, ¿no? Ese debería ser, en mi concepto… y a nivel de familia pueda desarrollar una actividad como padre, como hermano, como hijo, o sea globalmente hablando, un ser integral que maneje toda la condición...». «...pienso que para nosotros como médicos familiares hablamos mucho de integralidad, el concepto biológico, psicológico y social...».
3. Ética y valores morales. Los valores morales que caracterizan a la FI según los profesores, hacen referencia a solidaridad, sensibilidad, respeto, honestidad, cumplimiento, justicia y responsabilidad. «…no veo la ética como una materia aparte sino como transversal, o sea todos los docentes deberíamos tener muy presente en las cátedras esa dimensión ética…». «...Ese sería el respeto. Yo no puedo violentarte en tus creencias religiosas, políticas, porque soy el profesor...».
4. Proceso. La FI entendida de esta manera, es un proceso, en el cual las vivencias dan la madurez, moldean la persona. En la cotidianidad, en la convivencia se aprenden o se desarrollan los valores. En este sentido todos son modelos de otros. En el desarrollo de estos valores tiene que ver también lo aprendido en la vida y la cualificación. «...¡Eso sí es una mezcla de todo! A ver, la familia creo que aporta cantidades, ¿sí? (...) Sí.., ¿el colegio? También...».
5. Actitud. Las actitudes propias de la FI referidas por los profesores fueron calidad humana, crítica reflexiva, coherencia, imagen personal, compromiso, flexibilidad, mente abierta y sentido de pertenencia. Para los profesores, el desarrollo de una actitud crítica, al reflexionar sobre los conocimientos, los acontecimientos, las experiencias vividas, es FI, porque en la práctica profesional y en el desempeño en la sociedad, se requiere tomar distancia, mirar objetivamente las situaciones y desarrollar capacidad de análisis que permita tomar decisiones acertadas «…Formar a los estudiantes con una actitud muy crítica frente a los nuevos procedimientos, nuevos medicamentos. A tomar distancia de lo nuevo, mirarlo con prudencia…».
6. Aptitud. Con respecto a las aptitudes los profesores mencionaron la capacidad comunicativa, el liderazgo y la autonomía. La capacidad de comunicarse le permite, sobre todo al profesional de la salud, interactuar más fácilmente con los demás, expresarse con claridad de acuerdo con su interlocutor y comprender las situaciones y necesidades de sus pacientes. «...creo que sí, porque no tenemos una silla ahí recibiendo clase, tenemos un ser humano...».

Igualmente consideran los profesores que el liderazgo debe caracterizar al profesional en cualquier parte donde se encuentre. Esta persona debe liderar procesos de diferente orden, ya sea en el ámbito de su disciplina o en el ámbito social «...Quiero decir que soy la persona experta en salud en esa área y tengo que educar al ingeniero industrial, a la enfermera...».

La función docente que los profesores de la Facultad desempeñan se relaciona con su concepto sobre FI. En este sentido hay coherencia entre estos dos aspectos. Surgen como elementos relevantes los modelos que los profesores tuvieron durante su formación y su gran influencia en el papel asumido en el ejercicio docente. Las funciones que desempeñan los profesores se pueden agrupar en: modelo y tutor (Cuadro 3).

1. Modelo. Algunos profesores asumen un papel de modelos y lo son en relación con su formación profesional, su experiencia y en la imagen que proyectan frente a los estudiantes y a sus pacientes. Se presentan como modelo de formación profesional, tratan de desempeñarse bien, de acuerdo con su profesión o especialidad, porque los estudiantes tienen en ellos un referente profesional. También hay docentes que desempeñan un papel de modelo de coherencia entre lo que piensan y lo que hacen en su práctica docente, tanto con el ejercicio profesional como con el comportamiento como personas. Ejemplo de estas dos situaciones son la integración de conocimientos unida a la actitud asumida en el momento de interactuar con el paciente y los aspectos relacionados con la convivencia, como el respeto y la puntualidad «…me doy como soy, soy transparente, no tengo ningún problema en darle una sonrisa a alguien porque el hecho de ser docente no significa que yo tenga que poner la cara así, ...».

El otro modelo identificado es imagen, que se refiere tanto a la imagen que el docente proyecta en lo personal, por ejemplo su presentación, como a la imagen de la institución, de la cual ese profesor se presenta como un modelo. En lo referente a la imagen personal, se puede ver lo importante que es para los profesores resaltar con su propia presentación, la imagen que debe proyectar el profesional de la salud. Esto es más evidente en el Programa Académico de Medicina que en los otros programas. Las razones son diversas, pero una muy importante es la credibilidad que el profesional debe lograr en sus pacientes, credibilidad que el estudiante debe aprender a manejar. Esta imagen no sólo la tienen ellos, sino que la exigen en sus estudiantes «la persona que esta ahí para consolar puede ser una persona que por lo menos tenga una presencia física que le dé confianza al paciente, es importante venir uno arregladito...».

En relación con la imagen institucional algunas personas piensan que proyectar una imagen que refleje la FI recibida, es una responsabilidad social con la institución donde se formó y de esa manera actúan y se proyectan.
2. Tutor. Cuando el papel que desempeñan los profesores es el de tutor, dan soporte emocional a sus estudiantes cuando se requiere, brindan orientación tanto en lo académico como en los aspectos personales que preocupan al estudiante y que llegan a afectarlo en su desempeño académico, cumplen con una función de formación en valores y realizan una labor de acompañamiento del estudiante cuando lo necesita. «Porque tenemos asignado por años la tutoría de residentes, entonces uno se mete un poco más en su vida privada, en su vida familiar, de pronto ahí puede uno como dar algo más integral».

Los tres anteriores aspectos se complementan con la enunciación, por parte de los docentes, de un conjunto de factores facilitadores y un conjunto de dificultades para brindar FI, que se reseñarán sólo en términos de las categorías intermedias y detalladas que los expresan (Cuadro 4).

Los profesores mencionaron una serie de aspectos que pueden facilitar el desarrollo de la FI de los estudiantes durante su vida universitaria. Estos factores se representan por hechos o situaciones que se relacionan con el profesor, la institución o el currículo. Se identificaron factores como el estilo de docencia, la formación del docente, la vocación por la docencia, las actitudes y aptitudes del docente y el currículo.

1. Estilo de docencia. Favorece el comportamiento ético y el desarrollo de valores,…«entonces vamos a hacer una reflexión colectiva que tiene una dimensión ética muy grande…». También se encontró que el profesor enseña con el ejemplo como otra de las estrategias de FI. «…cuando el estudiante ve que el docente respeta las diferencias, aprende a respetar las diferencias…».

De igual manera, la capacidad de observación, la crítica y la reflexión, facilitan la FI; asimismo, la capacidad de integración y el fomento al desarrollo de potencialidades. «...rotación de digestivo, donde hay médico familiar, donde hay internista, donde hay gastroenterólogo, donde hay cirujano, cirujano de colon, recto, patólogos y todo…».
2. Formación del docente. En esta categoría se identificó que la formación tanto pedagógica como profesional y en otros aspectos distintos a la profesión del docente favorecía la FI de sus alumnos. «...Si usted no está preparado para hacer docencia, no puede ser un buen docente. ¿Cierto?...». «...Pero sí sé que dentro de lo que puede ser, las opciones que le da a uno la universidad, al profesor para formarse, puede estar concebida esa condición, por ejemplo en la especialización en docencia universitaria...».
3. Vocación. En algunos profesores se identificó la vocación por la docencia a través del placer por ejercerla y su compromiso con la docencia «... ¡vivo muy contenta! (…) pero no sé, no, no veo mi vida como fuera de esto...». En este sentido también se evidenció la inclinación de los profesores por la formación de sus estudiantes como seres humanos.
4. Actitud. El estudio reveló también que hay una serie de actitudes de los profesores que facilitan la FI y en ellas aparecen la calidad humana, interés y disponibilidad, apertura de pensamiento y sensibilidad hacia la FI. «...Y a veces han llorado, allí, cuando empiezan a contar dificultades que han tenido, pues… cómo llegaron hasta la Universidad, porque estos muchachos traen muchas cosas de familia, de ambiente, de medio violento…».
5. Aptitud. En este sentido los profesores destacaron dos aspectos: la capacidad que tiene el profesor para enseñar y la capacidad de análisis.

En relación con la capacidad de análisis los profesores hablaron de hacer pertinente y relevante la formación de cara a las necesidades de cada estudiante, estas son diferentes para cada uno y pueden ser tanto cognitivas como afectivas. Esta misma capacidad se debe fomentar en el estudiante, para que esté preparado para analizar el contexto, las personas y las situaciones en un momento determinado y pueda aplicar los conocimientos, de acuerdo con ello, «…Algunas características que en definitiva, hacen la diferencia como son el manejo intersectorial de los problemas, la diplomacia al abordar los problemas, el tener que solucionar, eh, dificultades económicas, el contacto con el sector político, el contacto con las comunicaciones…».
6. Currículo: El currículo aparece en este estudio como un factor facilitador muy importante para la FI de los estudiantes y en esta categoría se identificaron dos aspectos: la relación docente-asistencial y la flexibilidad curricular. «...Sería entonces como profundizar ese aspecto con respecto a la docencia-asistencia porque lo considero muy formativo...».

En relación con la flexibilidad se tuvo en cuenta la realización de actividades académicas en distintos escenarios y en diversos contextos así como la oportunidad de brindar diferentes experiencias, que permitan el crecimiento personal; piensan que favorece la FI porque propicia que los estudiantes desarrollen valores, cualidades, aptitudes, iniciativas y creatividad, es decir sus potencialidades como ser humano. Al respecto mencionaron puntualidad, respeto, y liderazgo (Cuadro 5).

Así como se encontraron factores que facilitan la FI, hubo también factores que hacen difícil brindarla. Los profesores han coincidido en que estos factores tienen que ver con aspectos inherentes a la docencia, debilidad en la formación pedagógica, relación entre docentes, estudiantes y pares, actitudes del docente, el currículo y con aspectos relacionados con la institución.

1. Relacionada con la docencia. Los aspectos inherentes a la docencia tienen que ver principalmente con la prelación a la enseñanza profesional. «...Discutir con un estudiante a veces el texto de un libro por ejemplo, de una profesión diferente a la nuestra, de un libro que no sea de odontología, a veces se nos complica, ¿no? No nos salimos de, de lo propio profesional...».
2. Debilidad en la formación pedagógica. Limitan la práctica docente e impiden que se puedan generar experiencias, innovar estrategias, crear espacios diferentes a las clases magistrales entre otros. Además, los profesores piensan que la Universidad no le ha dado hasta ahora mayor importancia a la formación pedagógica como criterio para la selección de los docentes. En estas circunstancias la FI es muy difícil. «...los profesores no estamos preparados para eso, porque desconocemos y a veces, tenemos hasta confusión de lo que es integralidad...».
3. Relaciones entre docentes, estudiantes y pares. Estas dificultades constituyen un obstáculo para la FI porque hacen difícil la comunicación, el mejor conocimiento de cada uno y la comprensión de las necesidades o problemas que se puedan presentar. Al respecto una de las dificultades señaladas por los profesores está en los grupos numerosos de estudiantes que no permiten establecer relaciones cercanas con ellos.
4. Actitud: Este aspecto favorece o dificulta brindar FI, para este estudio se identificó que la falta de calidad humana de los profesores y la apatía de actores constituyen una interferencia hacia la integralidad. «...Entonces se ofrece un diplomado en dirección universitaria, ¡ay! eso no me aplica, no, no voy pa’ eso. Y se ofrece un diplomado en consejería estudiantil y ¡no! ¡eso para mí no! O se da una charla sobre tratado de libre comercio y ¡no! ¡eso a mí no me importa!...». «…Es decir un hombre genial, pero como persona no…».
5. Currículo. Así como el currículo es un aspecto muy importante para facilitar la FI, también puede convertirse en un obstáculo, debido a la rigidez curricular mencionada por todos los participantes; ésta hace que no haya tiempo ni espacio para otras actividades importantes en la formación humana. «…programas de la Universidad que traten no sólo de llevar al estudiante sino sus docentes a otros escenarios, pero que no sean escenarios rígidos…». «…pero a nuestros estudiantes no les queda tiempo, porque los tenemos todos acaparados, estudie, estudie, trabajos, presentación de temas y no les queda tiempo…».
6. Relacionadas con la institución. Los profesores piensan que siendo la FI uno de los principios de formación en la universidad, este concepto debería ser bien manejado por todos los profesores pero no es así, esto se relaciona en muchos casos con la actitud de apatía descrita antes. A la pregunta directa sobre si conoce las políticas de la universidad sobre FI, los profesores manifestaron que no. Esto ocurrió con la mayoría de los entrevistados. «No sé de eso. Solamente ahora con la, la cuestión del, del simposio... no sé nada de esas...».

Entonces: ¿qué piensan, sienten y hacen los profesores? Al analizar los resultados obtenidos en esta investigación se encuentran las respuestas a las preguntas planteadas.

¿Qué piensan? Los profesores piensan que la FI se relaciona básicamente con tres grandes aspectos: formación humana, integración y proceso. Como formación humana, la FI debe procurar hacer énfasis tanto en los conocimientos propios de las profesiones como en los diferentes a la profesión, a saber, culturales, deportivos, artísticos, lúdicos, espirituales, gerenciales y comerciales, que les permitan desarrollar todas sus potencialidades y los capacite para desempeñarse con calidad y compromiso en cualquier situación en la que se encuentren en la vida. Además, dicen los profesores, que se debe procurar también la formación de los estudiantes como personas capaces de responder a las necesidades de su entorno, ciudadanos colombianos que trasciendan su disciplina y se incorporen en el esfuerzo de conseguir una sociedad más equitativa.

Esta formación humana entendida así, requiere establecer principios éticos y valores morales, y también el desarrollo de actitudes y aptitudes, que le permitan ejercer liderazgo y relacionarse con los demás respetando sus diferencias y comprendiendo los efectos que el entorno en el cual se desenvuelven puede ejercer sobre su comportamiento, rendimiento y salud, entre otros asuntos. En cuanto a integración se refieren a integración de conceptos, conocimientos y elementos propios del ser. Como la FI es un proceso que se inicia en el hogar y se continúa a través de la vida, a la Universidad le corresponde un papel básico porque tiene la responsabilidad de admitir a los estudiantes en una etapa clave de su formación.

Los profesores manifiestan que para hacer posible la FI se requieren ciertos factores como su propia sensibilización, la de los estudiantes hacia ésta, formar de modo integral a los docentes y propiciar su fortalecimiento pedagógico que les permita analizar y dimensionar el alcance de la tarea de formación del capital humano, encomendada por la sociedad.

Al reflexionar sobre los conceptos que expresan los profesores se encontraron dos tendencias en la Facultad de Salud: Formación humana del estudiante y concepción biopsicosocial del paciente.

Es importante resaltar que en las dos tendencias, los aspectos relacionados con la ética, los valores morales, las actitudes y aptitudes que se mencionaron en los conceptos, se consideraron parte fundamental de la formación. Asimismo, los conceptos de proceso e integración estuvieron presentes en ambas tendencias. Es decir, para unos y otros la FI consta de esas partes. La diferencia está en el enfoque: un grupo lo hace en el estudiante como ser humano y el otro hace el énfasis con la mirada sobre el paciente.

En la tendencia de formación humana del estudiante, los profesores piensan que la FI tiene que ver con que la persona del estudiante sea comprendida y entendida desde lo humano. Por su parte los profesores de la otra tendencia, enfatizan en los conocimientos profesionales aplicándolos con una concepción biopsicosocial de los pacientes.

¿Qué hacen? Lo que los profesores hacen con referencia a la FI tiene conformidad estrecha con lo que piensan que es FI y en esto son muy coherentes. Así, pues, dan ejemplo en la formación de valores y los exigen, dan ejemplo de formación profesional y habilidad clínica-asistencial, con conocimientos sólidos adquiridos durante su experiencia universitaria de pre y post grado y a través de su actualización permanente. Enseñan con el ejemplo el trato respetuoso a los enfermos. Igualmente dan ejemplo en la presentación personal y la exigen en sus estudiantes porque consideran que es señal de respeto y de igual manera genera credibilidad.

Sin embargo, al analizar las dos tendencias conceptuales, se encontraron algunas diferencias en el hacer relacionado con FI entre los dos grupos. En este sentido los profesores de la tendencia de formación humana del estudiante organizan tareas extracurriculares, artísticas, culturales, deportivas y académicas e integran labores académicas y lúdicas. Realizan actividades o acciones que fomentan el ejercicio de la concertación, la participación y el cumplimiento de normas. Brindan espacios para dialogar con los estudiantes y para conocerse mejor como seres humanos, para escucharlos y orientarlos y discuten con los estudiantes en su actividad académica temas de interés general.

Por otra parte, los profesores del grupo que piensa que la FI debe lograr el desarrollo en los estudiantes de una mirada biopsicosocial de los pacientes, realizan las actividades encaminadas a tal fin sobre todo en estudiantes de post grado, con énfasis en la atención de los enfermos. Ejemplo de estas actividades es la orientación continua a los estudiantes en la atención a los pacientes, la generación de espacios de integración de varias especialidades con el fin de desarrollar actitudes de reflexión y crítica sobre los casos y los procedimientos propios de atención a sus pacientes.

¿Qué sienten? Todos los profesores entrevistados sienten que tienen un compromiso muy grande con la FI de sus estudiantes. Se sienten responsables del proceso y de esa manera lo asumen. En lo personal, dicen que el reconocimiento a la labor docente que trasciende la trasmisión de conocimientos, hace sentir muy bien al profesor, le eleva la autoestima y le brinda satisfacción.

DISCUSIÓN

Cuando se trata de estudiar las experiencias y el sentir de las personas frente a ellas se requiere de métodos que vayan más allá de cuantificar los sucesos que a esa persona le ocurren en un tiempo y un espacio determinados; trascender la mera ocurrencia de los hechos para llegar a la percepción que las personas tienen de ellos, a la interpretación que hacen de los mismos, a la forma cómo los viven y los sienten, mediante qué experiencias, con quién, dónde y en qué época de su vida ocurrieron.

La educación superior tiene un papel fundamental en la FI del ser humano, más aún si se tiene en cuenta que cada día es mayor el número de adolescentes que ingresan a las universidades y que cada vez también surgen amenazas para la formación del hombre, como la inversión de los valores, la inmensa cantidad de información y la facilidad para obtenerla, la fragmentación del conocimiento, entre otros. La Universidad del Valle ha estado comprometida con la FI de sus estudiantes y así lo ha expresado en los diferentes acuerdos que rigen los programas de pregrado desde la década de 1960. El literal a) del artículo 2 del Acuerdo 009 de 2000 del Consejo Superior, hace referencia al concepto así: «La FI se entiende como el estímulo de las diversas potencialidades intelectuales, emocionales, estéticas y físicas del estudiante, a partir del ofrecimiento, en el currículo expreso o formal y en el clima cultural de la Universidad, de experiencias formativas que amplíen su horizonte profesional y su desarrollo como ser humano y ciudadano.» Este concepto es coherente con el que se encuentra en la Constitución Política de Colombia de 1991 y en las leyes que rigen la educación superior en el país.

Estos conceptos se relacionan en gran medida con lo que expresan los profesores de la Facultad de Salud que están en la tendencia de la formación humana de los estudiantes, pero sólo en forma parcial con los expresados por los profesores cuya tendencia se centra en los pacientes.

También se encuentra una relación estrecha de los conceptos del primer grupo de profesores con las ideas de Fichte17. «Una FI es entonces aquella que contribuye a enriquecer el proceso de socialización del estudiante, que afina su sensibilidad mediante el desarrollo de sus facultades artísticas, contribuye a su desarrollo moral y abre su espíritu al pensamiento crítico. La institución universitaria favorece la formación humana de quienes pasan por ella, en la medida en que a través de sus funciones de docencia, investigación y proyección social envuelve al estudiante en vivencias intelectuales, estéticas y morales que le permiten sentirse implicado y afectivamente comprometido en prácticas específicas y valores determinados».

Entendida así, la FI va más allá de la capacitación profesional, aunque la incluye. La educación que brinda la universidad es integral en la medida en que enfoque a la persona del estudiante como una totalidad y ofrezca una práctica educativa centrada en la persona humana. En relación con lo anterior en la Facultad de Salud es necesario trabajar este aspecto, porque se ve en muchos casos un currículo que hace demasiado énfasis en los contenidos profesionales, y deja de lado los de la formación humanística. A propósito, cuando los docentes hablaron de dificultades para brindar FI, se refirieron a la rigidez curricular y a la falta de tiempo para otras actividades. Aquí surge también otro punto importante que se debe considerar, pues este estudio pone de manifiesto que la flexibilidad curricular no se da en la facultad, a pesar de ser uno de los principios que rigen los programas académicos en la Universidad.

Uno de los aspectos más importantes que mencionaron los profesores fue la formación del docente como facilitador de la FI y de modo específico la formación pedagógica, porque en definitiva le permite entablar una relación nueva con el conocimiento, con enseñar y con aprender, y cuando esto sucede, aparece una conexión muy distinta con sus estudiantes, más cercana y más humana. Esto se enlaza también con el concepto de la calidad humana del docente.

Estos conceptos de FI demuestran que los profesores son unos actores muy importantes en este proceso. Se requiere que ellos también tengan una FI para que puedan asimismo asumir esta tarea con sus estudiantes. Una observación interesante de esta investigación y que puede resultar crítica, surge al analizar los motivos que tuvieron los profesores para iniciarse en la docencia. Algunos manifestaron que tenían vocación o una motivación académica para ingresar a la universidad como docentes. Tener vocación y gusto por la docencia resultó ser una excelente puerta de entrada para permitir la FI de los estudiantes, porque el profesor en su práctica adopta actitudes que le hacen más constructiva y gratificante esta tarea de formación.

De todas maneras, si se tiene en cuenta que la FI es un proceso que se lleva a cabo durante toda la vida, la función formativa de la universidad se puede afectar en la medida en que por sí sola no puede satisfacer tal tarea dentro de la sociedad. Además de la familia y de las otras instituciones educativas en las cuales haya estado un estudiante, hay una responsabilidad en la formación que el estudiante debe adquirir de modo crítico, pues no todo depende de la institución.

CONCLUSIONES

Como se puede apreciar en este estudio, a pesar de que hay divergencia en la manera de entender la FI, existe un compromiso grande de los profesores con lo que cada uno piensa que es FI.

Además, los profesores manifiestan una serie de dificultades para brindar FI, entre las que se encuentran la rigidez curricular, la falta de tiempo y los grupos numerosos de estudiantes que hacen difícil tener una relación más personalizada.

De aquí se deriva que la FI es un aspecto que se debe incluir desde la fase del diseño curricular de tal manera que los contenidos, las experiencias, las estrategias pedagógicas, los actores y demás aspectos relacionados, contribuyan a su concreción. Este es un tema que se debe investigar en la Facultad de Salud, con el objeto de verificar la coherencia entre lo que plantean la universidad y los programas académicos en relación con la FI de los estudiantes.

Otro tema que amerita ser estudiado es el de la formación pedagógica de los docentes como facilitadores de la FI. Aquí surge la pregunta, ¿qué aspectos de la formación pedagógica serían los que se deben enfatizar en los docentes para fortalecer o desarrollar en ellos las competencias a fin de que puedan brindar FI a sus estudiantes?

El estudio presentó un valor agregado que consistió en permitir que los profesores participantes tuvieran un espacio de reflexión de su práctica pedagógica en relación con la FI. De ese proceso de reflexión y del análisis de los resultados del presente estudio quedan planteados algunos interrogantes que deben ser resueltos para favorecer la FI:

.¿Cómo debe ser el profesor que necesita la Universidad del Valle para fortalecer la FI de sus estudiantes?
.¿Cómo se pueden incorporar estos conceptos al proceso de selección de docentes?
.¿Cómo potenciar el papel de los profesores que brindan formación integral, como factor generador de corrientes de pensamiento y de acción?
.¿Cómo lograr que las políticas de FI de la Universidad del Valle se conviertan en un referente cotidiano y concreto de las prácticas pedagógicas?

REFERENCIAS

1. Morin E. Los siete saberes necesarios para la educación del futuro. Santa Fe de Bogotá: UNESCO, Cooperativa Editorial Magisterio; 2002.
2. Delors J. La educación encierra un tesoro. Madrid: Santillana Ediciones UNESCO; 1996.
3. Neef M. Buscar la verdad en un océano de mentiras. En: Octavo Simposio de Investigaciones en Salud 2006: La investigación como compromiso social. Octubre 25, 26 y 27 de 2006. Cali: Universidad del Valle, Facultad de Salud; 2006. CD video.
4. Ministerio de Educación Nacional. Ley 80 de 1980. Bogotá: Ministerio de Educación Nacional; 1980.
5. Congreso de la República de Colombia. Constitución Política de Colombia 1991. Bogotá: Congreso de la República de Colombia; 1991.
6. Ministerio de Educación Nacional. Ley 30 de 1992. Por la cual se reglamenta el servicio público de la educación superior. Bogotá: Ministerio de Educación Nacional; 1992.
7. Universidad del Valle. Acuerdo 003 de 1989. Cali: Universidad del Valle; 1989.
8. Universidad del Valle. Acuerdo 001 de febrero de 1993. Cali: Universidad del Valle; 1993.
9. Universidad del Valle. Consejo Superior. Acuerdo 009 de 2000. Cali: Universidad del Valle; 2000.
10. Universidad del Valle. Consejo Superior. Resolución 028 de mayo 19 de 2005. Plan Estratégico de Desarrollo 2005-2015. Cali: Universidad del Valle; 2005.
11. Tovar MC. La formación integral, una experiencia pedagógica de profesores y estudiantes en la Facultad de Salud de la Universidad del Valle. Colomb Med 2002; 33: 149-155.
12. Sandelowski M. Time and qualitative research. Res Nurs Health 1999; 22: 79-87.
13. Parker MJ, Addison RB. Evaluating an interpretative account. Citado por: Parker MJ, Addison RB. Entering the circle: Hermeneutic investigation in psychology. New York: University Press; 1989. p. 46-71.
14. Guba E, Lincoln Y. Citado por Tatano BC. The evaluation of its credibility, fittingness, and auditability. Qualitative research. West J Nurs Res 1993; 16: 263-265.
15. Asociación Americana de Antropología. Código de Ética. Anthropology Newsletter Meeting Edition. Asociación Americana de Antropología. November, 1996. p. 20-24.
16. Heidegger M. Citado por Álvarez-Gayou JL. Cómo hacer investigación cualitativa. Fundamentos y metodología. México: Paidós Educador; 2003.
17. Fichte JG. Discursos a la nación alemana. Serie Biblioteca de la literatura y el pensamiento universitario Sales. Madrid: Editora Nacional; 1977.