IN MEMORIAN
GUILLERMO LLANOS BEJARANO
Guillermo Llanos Bejarano nació en Cali, el 18 de noviembre de 1933 en el hogar formado por el periodista Francisco Llanos y Rosa María Bejarano. Realizó estudios de medicina y de posgrado en Medicina Preventiva y Salud Pública en la Universidad del Valle. En la Universidad Johns Hopkins obtuvo el Master of Sciences Public Health, Mayor in Epidemiology. Realizó cursos en Encuestas por Muestreo, Educación Médica, Administración Hospitalaria y Pedagogía en varias universidades nacionales e internacionales.
A su regreso a Colombia fue el primer docente con estudios formales de posgrado en bioestadística del entonces Departamento de Medicina Social de la Universidad del Valle y después se trasladó a la Universidad Nacional de Colombia como Jefe del Departamento de Medicina Preventiva.
Fue el primer presidente de la Asociación Colombiana de Epidemiología, Presidente de la Sociedad Vallecaucana de Salud Pública,bConsultor en Epidemiología y del Programa Promoción de la Salud de la Organización Panamericana de la Salud, así como Asesor Regional en Cáncer.
Trabajó como epidemiólogo de la OPS en Perú, Costa Rica y Cuba. Al retirarse de la OPS regresó a Cali y se vinculó como docente en la Escuela de Salud Pública de la Universidad del Valle y a la Universidad Libre.
Guillermo además de ser un excelente docente era un obsesionado en la calidad de las publicaciones científicas; se apersonó de la revista Colombia Médica como editor y su constancia y dedicación lograron indexar la revista y su calificación como A1 de PUBLINDEX-Colciencias. Fue además asesor en epidemiología e impulsor permanente del Registro Poblacional de Cáncer de la Universidad del Valle.
Exmiembro honorario de diversas sociedades tales como la Sociedad Peruana de Epidemiología, Sociedad de Salud Pública de Costa Rica, Sociedad Medicina del Trabajo de Argentina, Sociedad Cubana de Epidemiología. Fue condecorado con la orden Sebastián de Belalcázar de la Alcaldía de Cali y la medalla Carlos Finlay de Cuba.
Fue amante del fútbol, de la buena música, especialmente de los boleros cubanos y antillanos. Sus alumnos, amigos y compañeros lo recordamos como una persona de extraordinaria calidad humana, sencillo, detallista, dedicado a la docencia de la epidemiología y la correcta escritura de los artículos científicos. Publicó 7 libros y más de 100 artículos científicos en revistas de salud nacionales e internacionales.
Con la muerte de Guillermo perdimos un amigo, un docente e investigador además de un gran ser humano que le hicieron merecedor del título de MAESTRO.
Luis Alberto Tafur Calderón, MD